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A review by silthesia
EL CIELO SOBRE EL TEJADO by Nathacha Appanah
«Érase una vez un país que construyó cárceles para niños porque no supo encontrar nada mejor que el impedimento, el alejamiento, la privación [...] y un montón de cosas que solo existen entre unas paredes para intentar convertir a esos niños en adultos de pro, es decir, en personas que siguen el camino trazado».
Con esta impactante primera frase arranca «El cielo sobre el tejado» la primera novela que leo de Nathacha Appanah y que con apenas 120 páginas nos narra la vida de esta familia y la oscuridad que rodea a cada uno de los personajes.
Durante la misma tendremos a tres protagonistas principales: Fénix y sus dos hijos, Lobo y Paloma. Arrancamos la acción tras el accidente de coche provocado por Lobo el cual es detenido y llevado a dependencias policiales. A partir de ahí, conoceremos el drama familiar que se entreteje entre estos tres personajes.
Una de las partes que más me han impactado ha sido la vida de Fénix y el cómo todo el dolor que arrastra, luego lo vuelca de la peor manera en las vidas de sus hijos.
Esta es una historia que nos abre los ojos y nos muestra el cómo muchas veces los traumas son heredados de unos a otros y que, mezclados con las malas circunstancias de la vida, la frustración y el orgullo, pueden acabar rompiendo con la familia y con cada uno de sus integrantes.
Pero no todo iba a ser oscuridad, parece que esta desgracia ocurrida a Lobo, será la excusa perfecta para poner las cartas sobre la mesa e intentar ser una familia. La cuestión es… ¿podrán lograrlo o es demasiado tarde?
Si tengo que destacar algo de la narración, a demás de la forma poética que tiene la autora de seguir el relato, son los cambios entre las perspectivas de los personajes y los saltos en el tiempo. Sin duda una novela muy dura y que en un par de escenas me ha dejado con muy mal cuerpo, pero que se disfruta gracias a esa amargura.
Con esta impactante primera frase arranca «El cielo sobre el tejado» la primera novela que leo de Nathacha Appanah y que con apenas 120 páginas nos narra la vida de esta familia y la oscuridad que rodea a cada uno de los personajes.
Durante la misma tendremos a tres protagonistas principales: Fénix y sus dos hijos, Lobo y Paloma. Arrancamos la acción tras el accidente de coche provocado por Lobo el cual es detenido y llevado a dependencias policiales. A partir de ahí, conoceremos el drama familiar que se entreteje entre estos tres personajes.
Una de las partes que más me han impactado ha sido la vida de Fénix y el cómo todo el dolor que arrastra, luego lo vuelca de la peor manera en las vidas de sus hijos.
Esta es una historia que nos abre los ojos y nos muestra el cómo muchas veces los traumas son heredados de unos a otros y que, mezclados con las malas circunstancias de la vida, la frustración y el orgullo, pueden acabar rompiendo con la familia y con cada uno de sus integrantes.
Pero no todo iba a ser oscuridad, parece que esta desgracia ocurrida a Lobo, será la excusa perfecta para poner las cartas sobre la mesa e intentar ser una familia. La cuestión es… ¿podrán lograrlo o es demasiado tarde?
Si tengo que destacar algo de la narración, a demás de la forma poética que tiene la autora de seguir el relato, son los cambios entre las perspectivas de los personajes y los saltos en el tiempo. Sin duda una novela muy dura y que en un par de escenas me ha dejado con muy mal cuerpo, pero que se disfruta gracias a esa amargura.